Muy bien,precios normales y gente simpatica. En el centro y de camino a la catedral,,aunque es pequeño, tienen de todo.
Muy bien,precios normales y gente simpatica. En el centro y de camino a la catedral,,aunque es pequeño, tienen de todo.
Buen servicio y bebidas pero no me ha gustado que después de tomar 1 Martini Rosso que estaba a 3'50 en la carta; Me cobran 4 euros en la mesa . No lo veo correcto pues eso ha de figurar en la carta !!!
Es como el tomaco de los Simpson (tabaco+tomate), resulta adictivo pero no porque esté especialmente bueno. No es una cremolata de verdad porque tiene hielo. El de fresa y el de limón están decentes.
Granita di caffe e panda. El mejor granizado que me he tomado en mi vida, sin más. Amplia selección de frutas que el particular dueño elabora de forma artesanal.
Es un local muy pequeño, pero situado enfrente de la Catedral de Palermo. El hombre es muy amable y un gran profesional de las granitas (granizados). Por 2 o 2,50 euros puedes probar y saborear unas granitas de sabores artesanales hechos por el mismo. Mi...gran descubrimiento fue el de melocotón ( pesca) y fresas ( fragola), o el de cafe con nata. Es muy recomendable y más si se va en verano o cuando hace calor. IMPERDONABLE NO PROBARLOMás
Repetí. A pesar de ser un sitio pequeño es agradable sentarse dentro. Muy amable y atento el dueño. Café y granita muy buenos.
El café y los dulces son riquísimos!!!!! El Sr que atiende de una gentileza única!! Muy amable!! Todo muy rico!
Buenas granitas, sin duda de las mejores que hemos probado aquí en Palermo. La pedimos con pana y ésta era realmente deliciosa.
Uen sitio para una paradita Cerveza de barril muy fria y bien tirada Y unos muy buenos paninis rellenos Buenos dulces
Admiro lugares como este. Claramente es muy popular y apreciado, estaba (para mi sorpresa) en una de las calles más turísticas de la ciudad, justo en el centro, y aún así se sentía como una joya escondida. ¿Por qué? Dos razones principales. Primero, el dueño...te hace sentir que eres su única prioridad; en ese momento, solo le importa que disfrutes su granizado y nada más. Aunque la mayoría de las personas probablemente piden lo mismo, él se las arregla para hacerte sentir como si estuviera preparando un brebaje raro solo para ti. No podía dormirse en sus laureles ni tratarte como un número más: se comprometió contigo como un ser humano. En segundo lugar, el granizado, que no creo que haya probado antes, estaba absolutamente delicioso. Una de mis experiencias favoritas en Palermo, tienes que vivirla.Más