Mi marido y yo hicimos un viaje por Rumanía en mayo de este año. Cogimos un tren desde Moldavia y llegamos a Bucarest. Alquilamos un coche y pasamos recrriéndonos Rumanía 2 semanas. Cuando llegamos a Bucarest decidimos quedarnos unos pocos días y ver los lugares de interés.
Bucarest es un sitio impresionante lleno de contradicciones. El viejo centro histórico merece la pena verlo, así como varios museos.
Estuvimos alojados en el hotel (Casa) Capsa. Encontramos el hotel cuando íbamos en coche por el centro, después de dejar el hotel en el que habíamos hecho la reserva en principio (el hotel Duke – tiene su crítica aparte).
El Capsa está de verdad ubicado de maravilla para moverse por allí, encontrar sitios donde comer y hacer turismo por el centro. La habitación que nos dieron la habían redecorado hacía poco. Era bonita y silenciosa. El baño estaba reluciente de limpio y todo funcionaba. Había aire acondicionado e iba bien (hacía mucho calor allí en mayo – de 32ºC para arriba).
El desayuno lo servían en una zona muy bonita destinada a este propósito – a menudo organizan el desayuno en una zona en el sótano o en el bar o algo así, pero este había sido bien planeado y era muy agradable. El desayuno no era una maravilla, pero sin duda adecuado. Había mucho café caliente y agua para hacer té, una selección de pan y mermeladas y mantequilla y zumos, así como salchichas y huevos revueltos, huevos duros y yogur. Las cosas típicas de comer, pero hechas mejor que en la mayoría de las otras partes del mundo.
Pagamos más de 200€ la noche.
Creo que de lo único que me puedo quejar es del personal. Si has ido de viaje a alguno de los países del antiguo bloque del este, sabrás que el servicio les es un concepto ajeno, así que tienes que aceptar lo que hay. Pero normalmente no pagas 200€ la noche. Lo mejor que puedo decir del personal de recepción es que no tenía interés y lo peor que eran unos maleducados. ¡Solía haber botones sentados en el vestíbulo viendo la televisión! Muy fuera de lugar.
A mi marido le molestó que no le hubiesen pasado la aspiradora a la moqueta cuando llegamos, ¡y no lo hicieron durante los 4 días que estuvimos allí!
Así que resultó ser un sitio precioso ubicado de maravilla con graves problemas en el servicio, pero no peores que en cualquiera de los otros lugares de Europa oriental en los que he estado. PERO le da puntos que el aire acondicionado funcione (fuimos a sitios más tarde en junio en los que hacía un calor espantoso, ¡y los hoteles no ponían el &*^%$ aire acondicionado!¿A qué viene eso?). Si volviésemos a Bucarest intentaríamos encontrar algun sitio un poco menos caro. Bucarest está cobrando los precios de París y le queda MUCHO para poder justificarlos.