Me vine para desconectar en un viaje de negocios y no me ha defraudado. El hotel está en medio de la naturaleza y cerca de un pueblo pequeño para algunas compras. La playa no es para bañarse pero el entorno y las instalaciones muy bien. La comida muy buena también. No merece la pena salir del resort. Perfecto para descansar y escuchar los pájaros desde el el balcón o la infinity pool^^

Se trata de un hotel pegado al mar en la isla de Langkawi. Lo más destacable es su personal. Es muy profesional y amable.

Los servicios son de alta calidad. Buena comida, buen Spa y buenas instalaciones. Como únicos peros diría que al mobiliario de las habitaciones le hace falta renovación y que la arena bajo el agua en la playa hace que no tenga prácticamente uso para un baño dado que es demasiado blanda.

Es destacable su atmósfera tranquila, no hay ruidos que perturben el sosiego. Además tiene un buen centro para conferencias, aunque no es de lo mejor que tiene.

Su situación hace que sea accesible a muchos servicios exteriores (excursiones, buceo, restaurantes, compras, etc..) de manera muy cómoda. El personal está siempre disponible para facilitar información al respecto.

Aunque no me aloje en las villas, estas tienen un aspecto inmejorable. Como para entrar y no salir hasta el final de la estancia. Son bonitas y bien equipadas para unas vacaciones de lujo.

Por último comentar que el hotel tiene atenciones especiales con los niños.

Es un hotel muy bueno y recomendable.

Es la tercera vez que vamos a este hotel.
Su situación es buena. Cerca del pueblo de Kuah, donde salen barcos para las islas y excursiones maritimas.
El hotel exteriormente, jardines, piscinas, etc, esta realmente bien. Es muy bonito.
Las habitaciones necesitan una re-decoración, pero tambien están bien. Son espaciosas. El personal es amable.
Se cena muy bien y el desayuno es espectacular.