Lugar amplio, con distintos sectores con diferente música, sin pachangas ni reggaetoneros, con personas de todos los estilos, el mundo en un solo lugar.
No necesitas ir a Europa para escaparte de las discos aburridas que tocan el mismo perreo toda la noche.
A veces se llena mucho por lo que hay que hacer fila para entrar y para comprar algo adentro también lo que aveces es un poco incomodo.
A pesar de ser grande, con muy buena música y muy diversa, le falta un poco mejorar en los baños y controlar el cigarro adentro. Pero a pesar de esos detalles,es lejos el mejor lugar para ir a bailar, no hay otro como la Blondie en Santiago.