Fui con mi pareja (tenemos 26 años) un día miércoles después del trabajo (como a las 19:30 hrs) como es una atracción para niños principalmente, pensé que iba a estar lleno de niños, pero no fue así. El lugar cuenta con amplio estacionamiento gratuito, el recinto en sí no es tan grande como se muestra en videos y/o fotos, pero con poca gente se logra disfrutar muy bien. Cuenta con mesas para sentarse a descansar o comer alimentos de la propia cafetería del lugar. Disponen de lockers que se arriendan por un costo de $1.000 y dejando alguna tarjeta de identificación mientras lo estés usando, estos lockers no son tan grandes, por lo que recomiendo ir con pocas cosas, además los candados son con llave, por lo que debes tener un lugar seguro para guardar esta llave y que no se te pierda mientras saltas (bolsillos con cierre por ejemplo).
Compramos las entradas por internet, y al momento de entrar te piden rellenar un formulario un poco largo donde Summit park se desentiende si pasa algún accidente. Por suerte no nos tocó fila, pero había sólo 1 persona atendiendo en boletería/confitería lo que sí nos afectó al terminar nuestra estadía (uno termina con hambre y sed) ya que la persona encargada se demoró un poco en atendernos. Si es primera vez que vas tienes que comprar unos calcetines para poder saltar (independiente si tu utilizas en ese momento o no) estos tienen un valor de $1.400, si quieres ir en una segunda oportunidad llevas estos calcetines para utilizarlos en el establecimiento.
El parque cuenta con baños, sala de primeros auxilios, personal que se encarga de vigilar por el correcto uso de los trampolines. ¿Cosas por mejorar? Más personal para atender cafetería y entradas. Falta aire acondicionado, por suerte fui en el horario de la tarde/noche y con poca gente, pero a las 12 o 14 hrs y con más público, los pocos ventiladores que tienen no deben ser suficientes para refrescar el ambiente.