Llegué a Pucón por la noche y no quería ir a un gran hotel ya que iba a estar en la ciudad solo una noche. Me recomendaron Hotel Palmera y cuando entré en mi habitación en el segundo piso, pensé que era lo que necesitaba. Nada lujoso, pero una habitación cálida, un baño limpio y de buen tamaño, una cama cómoda. ¡La mañana siguiente conseguí mi desayuno en la habitación y disfruté de una gran vista, todo incluido! Debo agregar que los recepcionistas fueron muy amables!
La recepción muy mala, lo único que te indican es "ahí esta la cabaña N°3". Para nuestra sorpresa la cabaña es realmente pequeña, muy calurosa, el dormitorio principal esta al lado de la calle y junto a un pub que no permite descansar hasta altas horas de la noche debido a la música y al ruido. Durante la tarde el sol le da directo a la cabaña por lo que el calor se hace insoportable para estar al interior. Tiene una habitación con un camarote que es realmente inhóspita por lo reducida en tamaño. Finalmente el estacionamiento al interior del recinto es un caos, para sacar un auto hay que mover 3 o 4 autos de otras personas.
En resumen, una vergüenza. sólo aguantas una noche en esa cabaña y tienes que buscar otro lugar.
Este es un buen lugar para alojarse si usted viene con amigos.
Fuimos a un congreso en 2014 Nov y reservamos 3 noches.
Al principio había un misunderstading ya que reservamos una choza con dos habitaciones y 5 camas pero la recepcionista nos dio una habitación 5 camas. Él quería cobrar más cuando pedimos cambiar lo que originalmente estaba reservado y cuando nos exigieron a hablar con su superior sobre la misunderstangind estuvo de acuerdo en cambiar nosotros. Después, Ignacia, la recepcionista de día se disculpó y ella era bastante agradable.
Las cabañas son lo suficientemente acogedora para pasar las noches, para divertirse por las noches y la cama sin ningún problema. La limpieza era también bueno, nos fuimos para el trabajo y cuando volvimos todo estaba impecable.
No reservamos el desayuno.
En el momento de la salida nos pidieron a nuestro equipaje hasta tarde y Ignacia accedió a la izquierda en la recepción y cuando planees Nwe recogido, pero no hubo problema.
Volvería otra vez.