Bien ubicado, a cuadras de la calle principal. Es una casa antigua adaptada, cada esquina tiene un detalle encantador, me hizo sentir que viajaba a un jardín encantado. Fue una rica escapada de Santiago, solo elogios por mi parte. Los dueños siempre muy serviciales y atentos a nuestras necesidades. Si tengo la oportunidad de volver a San Fernando, no dudaría en quedarme en este hostal de nuevo.
Excelente servicio en todo ámbito, un lugar precioso y de alta historia, muy flexible en cuanto a el uso de los espacios, que por lo demás son muy lindos, la atención muy buena y son muy simpáticos c;
Un lugar agradable, armonico,todo muy limpio,la comida riquisima. Cada rincon de la casa cuenta algo hermoso, sus dueños son muy simpaticos y amorosos, es un lugar totalmente recomendable para ir disfrutar.
Es una casa adaptada con habitaciones con baño, atendido por sus dueños. Todo muy acogedor, ordenado y limpio. La cena es comida casera. Tiene estacionamiento cerrado. Es precio es bueno para la calidad del hostal. No está tan cerca del centro, si uno viene sin auto, pero es distancia caminable.
la casa en que se encuentra es acogedora, amplia, y posee muchos detalles de antaño. Excelente la limpieza, cómodas camas y baño muy limpio. Además, rico desayuno con pan amasado. La atención de los dueños es lo mejor.
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