Amala, Herman son los propietarios de este encantador hotel con historia en el mágico norte de La Gomera... Amables, serviciales, cultos... me hicieron sentir como en casa. Jamás olvidaré los sabrosos desayunos de Herman, y la historia del silbo y del cantante francés Feloche, que me llegó al alma, y que cómplicemente me descubrió Amala. Siempre llevaré conmigo los amaneceres en el hotel Añaterve, su luz, sus privilegiadas vistas a la plaza de Vallehermoso, los bancales, la playa al fondo, el croar de las ranas, el kikirikí de los gallos... la vida plena, al fin, y la maravillosa música que siempre suena en cualquier rincón... Recomendable: leer en silencio perdiéndose en el exuberante jardín de Añaterve.
Vallehermoso es un gran pueblo en el que establecerte si estás deseando experimentar una vida más tranquila en La Gomera. Está perfectamente situado para recorrer los senderos de las montañas y las terrazas de los valles exuberantes. ¡Me alojé en el hotel Anaterve durante cuatro noches habiendo planeado quedarme solo dos! Un refugio rural encantador con cálidos y amables dueños, Herman y Amala, que ofrecen una riqueza de conocimientos y consejos para paseos, etc, y la creación de deliciosos desayunos y cenas vegetarianas servidas en su encantador restaurante. Las habitaciones son luminosas y alegres, con vistas al valle y, si tienes suerte, ¡dormirás al son del canto de las ranas! Un lugar al que querrás volver...
Pasamos una gran estancia en Anaterve. El hotel tiene un gran ambiente. Herman y Amala fueron serviciales y amables. Las habitaciones estaban limpias, la comida era muy buena y muy bien servida. Los paseos eran estupendos y un montón. Salen autobuses desde la ciudad a destinos más lejanos. Hay una gran pastelería al entrar en la ciudad, pero solo abre pronto por la mañana y tarde al atardecer. En los meses de invierno lleva ropa de abrigo. Recomendaremos la estancia en Anaterve a todos nuestros amigos.
Pasamos una maravillosa estancia en este encantador hotel. Amala y Herman eran encantadores y muy serviciales. Nos alojamos en la suite, que era muy cómoda, con unas vistas maravillosas. La comida era fantástica en el Anaterve. Vallehermoso es un punto de partida ideal para algunos paseos maravillosos.
Me casé y fue el mejor momento de mi vida, que mejor broche para tal ocacion que unas vacaiones inolvidables España. El hotel de primera, el servicio espectacular. La comida exquisita y para nada escatimaron a la hora de servir. La vista un lujo y el personal amigable y acogedor, te hacen sentir como e de la casa. Totalmente recomendable, en cuanto pueda vuelvo!
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