Bonito lugar, cabaña calientita. Recomiendo cenar en restaurante (no tienen servicio de almuerzo), lo que si es un poco caro, $ 24 mil por persona sin bebestibles. La cabaña sólo tenía dormitorio y baño, sin cocina, en todo caso como sales a conocer no hace tanta falta. Buen desayuno. Mejoraría el baño, la tina está en desnivel, lo que podría dificultar su uso por alguien mayor.
En este lugar se vive la magia, contacto con la naturaleza en un alojamiento cómodo, seguro y con una atención de primer nivel, preocupados de cada detalle. Nos alojamos 3 noches y pasamos Año Nuevo ahi junto a nuestros dos hijos de 7 y 9 años, lo disfrutamos muchísimo!!! La cabaña totalmente equipada, limpia, amplia, calefaccionada y con unas vistas increíbles. El restaurante es rico y la atención de Diego es insuperable, nos hicieron sentir como en casa. Evelin de recepción se las arreglo para apoyarnos con cada petición especial, esmerada en hacernos sentir a gusto, todo muy acogedor. Usamos la tinaja y la pisicina temperada en un día de plena lluvia … fue maravilloso!!! Lo recomendamos 100% y esperamos volver algún día .
Es un hermoso lugar, de naturaleza exuberante, cabañas confortables y anfitriones acogedores. Viajamos en familia en febrero y nunca nos habíamos sentido tan seguros en tiempos de COVID. Protocolos estrictos, todo ordenado, limpio, se nota la preocupación por la salud y el bienestar de todos, Una alternativa excelente para desconectar y estar seguros en estos tiempos.
Un lugar precioso, rodeado de naturaleza , rio, aves, etc, Las instalaciones frias, nuestra cabaña no tenía la temperatura adecuada, la calefacción es centralizada , no era para morir de frio, pero no era confortable estar en la cabaña, creo que la temperatura aumenta a contar de las 19:00 hrs. El desayuno contaba con leche, huevos, pan de distintos tipos, mermeladas, kuchen, etc, este no está incluido en el costo de la estadía creo que costaba CLP 8.000.-, La cabaña cuenta con las cosas básicas que uno necesita y las camas son cómodas. El bar no tenía mucha variedad pero estaba correcto, yo no volvería a este lugar ya que pasé frio.
Se trata de un Lodge extraordinario, administrado por sus dueños, quienes llegaron a la zona hace mas de 30 años. Cuenta con habitaciones y cabañas muy confortables, espaciosas y completamente equipadas (incluso amenities como shampoo, crema, acondicionador, gorras de baño). Est{a emprazado a la orilla norte del lago Risopatron, cuenta con bellos jardines y bosques, piscina temperada y jacuzzis. Adermás, con su dueño se pueden concertar salidas a pescar en lancha. Ramiro es excelente pescador y es imposible no pesacr saliendo con el. Cuenta con dos senderos ára trakking perfectamente habilitados, hermosos, con miradores y paradas para fotografía. Excelente lugar para ir en familia. El restaurante es de primer nivel: desayuno tipo buffet, carta de platos elaborados, vinos excelentes y todo en un ambiente acogedor y bellamente decorado. Realmente la relacion calidad precio es optima. Mis felicitaciones a sus anfitriones.…
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