Descubre por qué tantos viajeros ven Gran Hotel Las Caldas como el hotel ideal cuando visitan Las Caldas. Además de aportar la combinación ideal de calidad, comodidad y ubicación, ofrece un ambiente romántico con una amplia variedad de servicios diseñados para viajeros como tú.
Las habitaciones de Las Caldas incluyen televisor de pantalla plana, minibar y aire acondicionado para una comodidad mucho mayor, y los huéspedes pueden permanecer conectados con wifi gratuito.
Conserje y servicio de habitaciones son algunos de los servicios que ofrece el hotel. Su piscina y restaurante también contribuirán a que tu estancia sea incluso más especial. Si vas en coche a Gran Hotel Las Caldas, hay parking gratis disponible.
Si te gustan los restaurantes de comida española, Gran Hotel Las Caldas se encuentra cerca de El Recreo de Las Caldas, Restaurante Campo Municipal de Golf Las Caldas y La Vizcaína.
Para Gran Hotel Las Caldas tu comodidad y satisfacción son lo primero, y están deseando darte la bienvenida a Las Caldas.
Para unas vacaciones en Asturias elegió el gran Hotel las Caldas. Dentro del mismo recinto hay hoteles de distintas categorías y nosotros nos alojamos en el de 5*. Es un hotel clásico, con decoración clásica, pero muy agradable y muy confortable. Quizás soy más fan de las habitaciones con decoración moderna, pero en este caso, a pesar de ser clásicas, disponen de todas las comodidades.Tanto el desayuno como la cena incluídos en la media pensión nos parecieron que valían mucho la pena. Y el servicio fue muy atento en todo momento. En cuanto a las instalaciones, disfrutamos de los dos centro de SPA de los que dispone el complejo. Y ambos nos encantaron. Personalmente prefiero el Manantial porque había mucha menos gente y porque nos permitió disfrutar de una estancia más tranquila, en las distintos espacios casi individuales decorados con mosaicos. Todo el recinto es como una ciudad balnearia de estilo art déco, bastante alejada del centro de Oviedo, pero fantástica para desconectar, descansar y disfrutar de la naturaleza. Desde allí se pueden hacer muchas excursiones a pie (como la senda del Oso) y a nosotros nos vino muy bien como punto de partida para conocer en coche el Principado.…
Pagué la friolera de 30 eur por 2 horas de estancia frustrada en el SPA. No funcionaban los botones de los chorros, la sauna de 90 grados estaba a menos de la de 70, las placas de marmol caliente estaban frias. y tenia que pedirle un vaso de agua cada vez a una empleada, falta de vasos en la fuente. ¿Protocolo covid? Gestión nefasta, porque la pobre chica obviamente no podía estar durante todos los ciclos de sauna. No se puede dejar a un cliente pidiendo vasitos a cada rato, muerte de sed. No se puede entorpecer un recorrido termal de 2 horas por 30€ de esta manera. Llevo 20 años visitando balnearios tras mi ejercicio, aunque en esta ocasión he salido mas tenso de lo que he entrado. Lo peor: Después de dos envíos de la reclamación, tanto a la encargada de a l balneario como la dirección, nadie me ha respondido. Hace más de un mes que reclamé.…
Tercera vez que venimos mi mujer y yo. En ésta ocasión quisimos alojarnos en el Gran Hotel, las habitaciones estándar son iguales que el 4 estrellas, pero más viejas, me esperaba habitaciones en consonancia con la decoración de los pasillos o incluso del maravilloso comedor de los espejos. Si lo que buscan es eso, creo que la adopción sólo es válida reservando en suits. El desayuno con una calidad excepcional. Cenamos en el restaurante Viator, no volveremos a hacerlo. El entrecot de vergüenza ajena (es un filete pasado), el salpicón de vieiras y gambas es excesivamente pequeño, pero de saber aceptable. El pastel de cabracho muy logrado, pero el mal sabor de boca dejado por el entrecot, ni me dejó disfrutar de la tarta de queso que, por cierto, era muy rica. Creo que por una cena para dos de más de 100€ debería ir en consonancia la calidad y elaboración. El spa es impresionante y uno de los mejores de España y merece la pena sólo por eso. En definitiva, deja en mal lugar la gastronomía asturiana pero, si lo que buscas es relax, silencio y unas termas y spa de ensueño, éste es tu lugar. Volveremos....(pero cenaremos en otro lugar).…
Llegamos mi pareja y yo a las 4 por no poder antes. Estancia,los dos spa,cena y desayuno. Nos dicen en recepción que cuando estemos en la habitación debemos llamar para reservar hora para los spa y resulta que para el aquaxana no hay hasta las 8 de la tarde y cierra a las 9. He pagado como todos para dos horas.Deberían de avisar cuando haces la reserva de esto. El chico que nos acompañó a la habitación muy amable. El manantial espectacular para relajarse. Y ahora vamos a la cena...en ningún momento de la reserva donde ya pagas la cena dice que no entre la bebida y la mayoría de platos llevan suplemento...al final siempre pagas.Cuando se supone que adquirimos media pensión. Volveremos a repetir pero sabiendo todo esto.
Nos alojamos en el Gran hotel Las Caldas un fin de semana. Muy buena experiencia, la suite real es preciosa, la decoración parece de película y además la cama es muy cómoda. El spa disfrutamos tanto del "aquaxana" como del manantial. Ambos muy buenos pero el manantial para mí el mejor, más intimo y la decoración preciosa. Disfrutamos del desayuno y a pesar de no poder coger las cosas como en un bufet "normal", el personal siempre dispuesto, amable y profesional. Conseguí desconectar que ahora es mucho
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