Todo espectacular!. Buena atención, buena comida. La habitación perfecta, no había ningún detalle que bajara el standard. Por poner una objeción: Tanto en el restaurante, como en el desayuno y haciendo el checkin del hotel me hicieron la misma pregunta respecto a mi acompañante y el motivo de la visita, lo cual me resultó incómodo.
La atención del personal es excelente, cordial, atentos. Mención especial para Emilio del restaurant Matsuri. Sin embargo, mantienen el precio alto, a pesar de que el SPA no está 100% operativo, mi habitación presentó fallas que intentaron arreglar pero no pudieron, el Lounge exclusivo para mi habitación no estuvo operativo, no me ofrecieron servicio de parking, ascensores panorámicos no estaban operativos y otros detalles. Pero mantuvieron el precio alto.
Realmente una experiencia única, con un menú inigualable de máxima calidad. Recomendamos especial a Pedro quien nos atendió con los vinos y nos guió para maridar. Asimismo, Ricardo el supervisor quien hizo que nuestra cena en Senso fuera increíble. 10000% recomendado, toda un experiencia.
Disfrutamos de una estadia de 6 noches en el Mandarin Oriental de Santiago. La ubicación del Hotel es ideal con respecto muchos puntos de interés de la ciudad. Lo más destacable es el excelente servicio en todas sus instalaciones. Recomiendo especialmente tomar el paquete de hospedaje con desayuno que es servido tipo buffet en el restaurante Senso. Durante varios días contamos con el excelente servicio del señor José Miguel quien tuvo varias atenciones con nosotros y fue de excepcional amabilidad durante cada visita que hicimos al restaurante. La variedad de alimentos en el bufet es muy amplia Y cuenta con una buena oferta de panes jamones frutas etc. Sin embargo lo que más resalta es la calidad en el servicio por parte de todas las personas que trabajan en el restaurante. Fue la atención al detalle y la calidad en el servicio la que hizo de nuestra estadía una experiencia aún más agradable.…
Todo excelente, sobre todo el servicio del personal, solo una incomodidad de una reserva en restaurant Matsuri, nos cambiaron a ultimo momento, por tener un evento (cumpleaños) sacándonos del interior, dejándonos en terraza cenando con 0° C, a punto de hipotermia. Terraza en invierno debiera ser cerrada al menos, para que sea mas cálida y agradable el momento y no sufrir cenando por el extremo frio. debido al evento que tenían en el interior, el servicio de platos demoro mucho.
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