Pasar por Kau! (Casa en Tehuenche ) un espacio no muy grande, pero cálido, chimenea y barra de café. Ubicado a pocas cuadras del centro de Natales, con una hermosa vista al borde costero. Junto a una tienda de ropa de marca reconocida, es un lugar agradable y tranquilo para evitar el viento propio del lugar. Sus preparaciones cafeteras y de reposteria no son de tipo gourmet. Lo cual no evita disfrutar de un momento agradable y excelente vista.
Me pareció que no existe una buena relación precio calidad. Las habitaciones tienen malas terminaciones y mal aislamiento acústico y térmico.Los baños mal tenidos y con equipamiento antiguo con desperfectos. La atención también no es muy amable.
muy buen alojamiento en general, limpieza prolija, camas adecuadas, sin embargo se necesita un poco mas cuidado y mantenimiento, los baños al no tener ventanas deberían tener algún tipo de extracción forzada, las ventanas deberían estar un poco mejor selladas, ya el fuertisimo viento logra colarse por algunos sectores, el desayuno deja mucho que decir, los desayunos de los refugios en las torres del Paine son mejores. y como acotación, deberían tener algún tipo de televisor y/o radio, por que para descansar falto algo de ruido.
Positivo Es un muy lindo lugar con una vista privilegiada. La habitación es muy original y está en impecable aseo. Las camas son muy cómodas. Permite guardar las mochilas mientras uno camina por la cuidad una vez realizado el check out. Como bienvenida la habitación tiene dos aguas embotelladas de la zona y un pequeño alfajor de regalo. Negativo El desayuno es muy malo. No tiene variedad de nada. Hay un adolescente que está jugando celular y no es capaz de atender o ver las necesidades de los huéspedes. No reponen pan ni frutas. Es pobre. Solo jamón y queso, yoghurt y mermelada artificial de frutilla. Jugo de naranja tibio y artificial. Pan añejo y leche tibia. Es muy incómodo estar pidiendo que repongan las cosas cada vez que falta algo. Tampoco contaba con variedad…
Estuvimos 4 noches en este hotel. Muy lindo y acogedor. Todas las habitaciones tienen vista al mar, incluso acostado en la cama tienes vista preciosa. El personal es muy amable. Las habitaciones son espaciosas, cómodas, fuimos en verano e incluso tuvimos calor. El desayuno es sencillo, pero suficiente. En el primer piso hay una cafetería con productos muy ricos. Allí mismo sirven el desayuno. Muy central, es posible caminar hacia todos lados. Hotel muy lindo, 100% recomendable.
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