Desde que vi este hotel, quise ir a taboga solo para tener la oportunidad de conocer el lugar. No decepcionó. Es privado, tiene un diseño hermoso y europeo, la vista desde el lugar es magnífica y desde la habitación donde me aloje, era sin igual. Teníamos piscina privada, en la noche sentarnos afuera a conversar mientras veiamos los barcos le añade un toque especial que no se si pueda mejorarse. La habitavio habitación venia equipada con fregador, microondas, una cocinilla (debes llevar ollas), platos, vasos, cubiertos. En fin todo lo que puedes necesitar La atención del personal es muy buena, amables, atentos. La Dueña también es muy gentil. Lo recomiendo mucho, definitivamente regresaría.
Ya conocíamos las instalaciones más no habíamos pernoctado nunca; decidimos hacerlo para nuestro aniversario de bodas y ha sido una gran elección. Desde la llegada Andres nos esperaba en el muelle con una sonrisa y amabilidad. En un carrito 4x4 nos traslado hasta el hotel, nos dieron cóctel de bienvenida y nos enseñaron las instalaciones con algunos arreglos que han venido haciendo. La habitación con piscina adentro es perfecta y muy privada, su diseño de interior espectacular te hace sentir en cualq lugar menos en panama. La cena estuvo bastante bien pero podría ser mejorada sin dudas, la hemos pasado muy bien
El hotel tiene demasiados detalles que lo vuelven clásico y especial como si te transportarás en un cuento. Realmente acogedor y cerca a la playa. La atención muy buena, aunque el restaurant no esta abierto todo el tiempo. Existe una cena nocturna que es parte de un paquete, pero no me pareció uff para el precio. Volvería al hotel sin duda.
Me encantó en lugar Excelente atención comida Muy cómodo felicito a la diseñadora la Sra Bern por tan bellos acabados Conocimos la historia del pueblo de Taboga muy histórico. Muchas artesanía Hay carritos para transporte.
Desde que salimos del muelle al llegar a la Isla de Taboga todo resulto ser un sueño!! Fuimos mi esposo y yo con mis 2 primos y al dia siguiente se unieron mi prima y mi tio. Nos recibieron en dos jeeps 4X4 y nos trasladaron al hotel Villa Caprichosa luego de un recorrido por la Isla. Alli nos esperaba Diane, la dueña con unas mimosas de bienvenida. El lugar es limpio, comodo y hermoso. Tanto la decoracion estilo europeo como los preciosos jardines es todo un sueño. Nos sentiamos como en la pelicula Mama Mia!! La atencion super especial!! La vista preciosa y la comida preparada por el Chef Venezolano estaba deliciosa y los precios de la misma, muy razonables. Les recomiendo a todos que visiten la Isla de Taboga, a solo 30 minutos de la ciudad y que se hospeden en La Villa Caprichosa. Sera una experiencia inolvidable y de seguro regresaremos nuevamente.…
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