¿Buscas donde alojarte en Futaleufú? Entonces no te pierdas Hosteria Rio Grande, una casa de huéspedes para familias que te acerca a lo mejor de Futaleufú.
Las habitaciones de los huéspedes ofrecen servicios como cocinita, y los huéspedes pueden permanecer conectados con wifi gratuito que ofrece la casa de huéspedes.
Hosteria Rio Grande tiene recepción abierta 24 horas, servicio de habitaciones y tiendas para que la estancia sea más agradable. El establecimiento también cuenta con desayuno incluido. Si vas a en coche a Hosteria Rio Grande, hay parking gratis disponible.
Mientras estés en Hosteria Rio Grande, quizás quieras probar Sur Andes (0,3 km) que están a solo un paseo.
Lo mejor de todo es que Hosteria Rio Grande es una estupenda base desde la que conocer numerosas atracciones de Futaleufú, como Futaleufu (0,3 km) y Plaza de Armas (0,1 km), a las que se puede llegar a pie porque están cerca.
Estamos seguros de que disfrutarás de tu estancia en Hosteria Rio Grande mientras descubres todo lo que Futaleufú ofrece.
Buena ubicación, habitaciones cómodas, limpias y bien decoradas;personal preocupado y dispuesto a ayudar. Desayuno se sirve en Cafetería muy acogedora y lindamente decorada, pero no cumple con variedad para ser desayuno buffet. Como desventaja tiene que los olores a comida del restaurant del primer piso suben a habitaciones.
Mi habitación single muy fría tenía para calefaccionar una estufa a gas. La cama y la ropa de cama muy mala, la almohada venía de una guerra.....muy descuidado el aseo y la decoración antigua y básica. El desayuno pésimo, te ofrecen huevos que preparan en el momento, la fruta entera, te o café, y pan añejo y frío. Muy por debajo de otros lugares. La hostería cuenta con un café donde sirven los desayunos muy pequeña e incómoda. La atención de las dos personas bastante parca y mala. No recomendable.
hace un par de años estuve en Futa, y almorcé alli, pedí un salmón con alguna guarnición, además de un vino chileno. Estuvo muy rico, la atención normal, y el precio nada del otro mundo. Había una gran chimenea y tenía vista a la plaza, asi que la pase muy bien. Sin lujos.
Comida rica, nada que decir de eso. Sin embargo, producto de un resfrío, necesitaba dormir y descansar, pero no pude hacerlo ya que toda la tarde estuve escuchando una música fuerte que no era agradable para el sueño. La verdad es que es desagradable algo así cuando lo que uno busca es descanso. Si va de pasada, quizás le sirva, pero olvídese de conciliar el sueño si eso quiere. Por otro lado, las habitaciones un poco antiguas y se escucha todo, y el agua, un poco fría. Por mi parte, buscaría otra opción si tuviera que volver.
Habitaciones poco cuidadas, se escucha hasta los ronquidos de las habitaciones de al lado, baño sin agua caliente y sin shampoo. En la mañana tuvimos que hacer fila para tomar desayuno y cuando nos tocó ya no quedaba nada.
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