Hermoso hotel, con una cálida atención y las instalaciones de ensueño por los motivos chilotes, con jardines hermosos llenos de flores y una vista a la bahía maravillosa!! Desayuno rico y un personal muy amable.
No conocimos las habitaciones, nos ubicaron en el ‘apartamento’ numero 1, una pocilga sucia, la cocina estaba tal como la dejaron los huéspedes anteriores, lo mismo el refrigerador, con restos de comida, en la habitación principal había ropa interior usada, no nos dejaron toallas, la infraestructura está en pésimas condiciones, en el baño, al salir de la ducha debes pisar unos cerámicos quebrados, las camas son viejas y la ropa de cama espantosa, en el living hay un sofá que parece salido de un vertedero (sin exagerar) los muebles son ordinarios, closet de cholguan que no se pueden abrir, el piso es de un terciado encerado y corres peligro de partirte la cabeza de un golpe, está tan mal construida que se oye todo lo q pasa afuera, los techos están inflados por la humedad y descascarados (techos bajos) además de estar inclinada con lo cual las maletas se movían solas, la promoción dice que el apartamento tiene vista al jardín pero es mentira! solo mira a una cancha de fútbol publica q tiene unos focos encendidos toda la noche, y lo promocionan como hotel boutique! es una verdadera estafa, hablé con el dueño (solo por teléfono, porque se esconde y no da la cara) y me dijo que era mi culpa, que yo había alquilado eso, nos arruinaron los últimos días de nuestras vacaciones. Tampoco tiene wifi aun cuando me habían asegurado que si. Cuando reclame a la administradora se limitó a exponer a las dos mucamas pretendiendo que yo me enfrentase con ellas, en circunstancias que dos personas no dan abasto con todo el hotel y los departamentos, un tremendo abuso laboral. Había reservado 3 noches pero nos fuimos apenas encontramos un departamento en Castro, nos daba miedo que saliera un ratón en cualquier momento desde los muebles de la cocina. Si usted acostumbra a viajar y exige unos mínimos, como limpieza y prolijidad por favor no vaya a este lugar.…
Hotel bonito, pintoresco con un restaurante muy bueno, el chef se luce. Sin embargo las habitaciones les falta cuidado por ejemplo: no colocan shampoo, toallas con humedad y aislación mala. El entorno del hotel bien cuidado con unas tinajas con una muy buena vista.
Faros del sur tiene hotel y departamentos en un mismo lugar con una vista privilegiada. Si bien no se encuentra cerca del centro, puedes tomar colectivos a una cuadra que te dejan en todas partes por 500 pesos. Una decoración acogedora, con calidez y una chimenea sensacional para los días de lluvia, como nos tocó a nosotros. Las habitaciones son confortables, cumplen con lo requerido y tienen una vista increíble. El desayuno es continental y en general el personal fue amable. Tal vez el único detalle que el check out es temprano (11.00 am). Muy recomendable.
Fui con mi pareja por 2 noches. La primera llegamos tipo 3am y el dueño nos dejó las llaves en recepción sin problemas. Al entrar a la habitación nos dimos cuenta de lo calentita que estaba. La cama es cómoda, no había mucha gente en el hotel por lo que no escuchamos pasos ni ruidos. El baño estaba ok, aunque faltó un poquito mas de aseo, de hecho habían unos calcetines en el estante que se les debe haber quedado a los huéspedes anteriores. El desayuno estuvo bueno, sólo que se sentía un poco de frío ya que la estufa la habían encendido hace poco. Todas las habitaciones tienen vista al mar. El personal es muy amable. Precio/calidad está bien. Recomendado.
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