Muy buen lugar para desconectarse, el trato de la señora Ivette, es muy sencillo y humilde, muy recomendable para ir en invierno, pues hay menos gente y se contemplan mejor los paisajes, las cabañas son de 30 y 45 mil pesos, y aunque pagamos por la mas chica, volveríamos a ir mil veces, por la buena vista y lo acogedora que era
Quedamos enamorados de Puñihuil, y en especial del lugar donde nos alojamos, Cabañas Pinguiland. Con un entorno y vista maravillosa del océano. Un lugar bastante cómodo, con todo lo necesario para hacer de nuestra estadía lo más agradable y por lo mismo, esperamos volver. En el mismo sitio cuenta con miradores que es un amor a primera vista del lugar. Muy recomendado. 👍🏽
Nos alojamos en una habitación del hotel. Muy sencilla, tiene lo básico, pero es cómoda y la vista es absolutamente hermosa. Hay treckings para hacer en los alrededores y está muy cerca de la playa desde donde salen los barquitos hacia las pingüineras. El desayuno no es muy variado, pero el pan es casero, igual que la mermelada y el queso. Todo de buena calidad, solo faltaría algo de fruta. Se puede almorzar y cenar en el restaurante del complejo muy bien y a buen precio. Muy amable la cocinera que está dispuesta a cocinar lo que uno desee. El encargado, Miguel y su hija muy atentos también. En síntesis, muy recomendable alojarse en este lugar paradisíaco.
Las cabañas tienen el equipamiento necesario para pasar algunos días, las vistas son increíbles, y la comida que se sirve en el restaurante es excelente. Todo el personal que atiende es extremadamente amable.
Muy lindo lugar! Llama la atención que si bien las cabañas no son de lujo, son un lugar absolutamente recomendable para quedarse. Aquí queda demostrado que con ganas se pueden hacer cosas muy buenas, no solo se necesita dinero y grandes infraestructuras. La atención de sus dueños increíble! Cuando llegamos Don Miguel nos atendió muy bien y se dio el tiempo en mostrarnos todas las cabañas. La vista privilegiada!!!! Las camas sencillas pero impecables!!! Incluso las cabañas incluyen desayuno con pan amasado recién hecho el que llevaron a la cabaña y traía un olor exquisito. Sin dudas recomendable y está a metros de la playa de la pinguinera. Solo recomiendo llevar agua para beber. Si bien es potable la que hay, es de un color no transparente lo cual podría traer inconvenientes. …
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