Estuve el fin de semana me pareció todo muy bueno. Las cabañas limpias y todo el programa se cumplió. Los almuerzos fueron muy buenos , tiene una variada carta . La preparación muy buena. Lo que sugiero en que en la carta especifiquen un poco más que contiene los platos ya que hay personas intolerantes a la lactosa y lo ñoquis con plateada traían crema pero es un detalle que propongo
Fuimos 2 matrimonio con programa en cabaña redonda, fueron 2 noches muy agradables,la cabaña tiene de todo y es cómoda, disfrutamos,del masaje y los almuerzos fueron increíbles, gran variedad ,todo muy bien cocinado y la atención impecable. La cerveza “ruta 41 “ también fue un descubrimiento. Totalmente recomendable
Fuimos en familia a almorzar y nos llevamos una grata sorpresa, el restaurante de Refugio El Molle es buenísimo, cuenta con un agradable entorno y es muy amplio funciona con un sistema de menú, su valor es de $18.000, el bebestible se paga aparte, tienen mucha variedad de entradas, fondos, postres, incluye la cafetería para terminar el almuerzo, son platos abundantes y riquísimos. Además se puede pasar la tarde en la piscina que está en el sector del restaurante y aceptan mascotas. Recomendación llegar temprano abre a las 13:00, luego se llena y la atención se vuelve más lenta.
Para que ponen una piscina exclusiva para niños si no fomentan su uso???? La piscina que se supone que es para adultos estaba llena de niños y guaguas. No es grato tratar de estar tranquilo en la piscina si tienes a niños pequeños tirandote agua mientras tratas de descansar.
Puedo opinar en el entorno de las cabañas, ya que por política del lugar no tienes acceso al hotel. El lugar es amplio, y mucho personal trabaja en la manutención diaria, hay varias piscinas y tinas de agua caliente, es fácil darse cuenta en el privilegio de la limpieza y orden en el lugar. Cabañas equipadas y limpias, buenas camas. Desayunos y almuerzos buenos, hartas opciones y todas bien preparadas y presentadas. Los sabores bien logrados. No observe los huertos ni Laguna de peces. Me faltó preguntar. Falta un servicio para acceder si te falta comprar algo. Especificar esto con claridad en la página web. Capacitar al personal en el uso de las camillas de jade. El entorno es relajante y te desconecta mucho de la ciudad.
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