Buena onda, platos sabrosos en el menú (siempre fuimos para almuerzo), recomendado para comer en la zona.
Buena onda, platos sabrosos en el menú (siempre fuimos para almuerzo), recomendado para comer en la zona.
Caminando por la ciudad de Valparaíso un grupo de amigos y yo buscamos durante un buen rato un lugar donde comer. Tampoco era muy tarde, serían cerca de 14:00. Cansados de ver cómo los locales de la zona más turística querían acribillarnos por tristes platos...de escasa cultura chilena entre sus cucharadas, decidimos caer en la red de un restaurante llamado "Delicatessen Emporio", como si la magia de la acogedora Italia profunda se dejara caer entre las mesas de su salón. Una vez en el local que, siendo realistas, no estaba nada mal desde fuera y desde dentro, tomamos asiento para proceder a decidir los alimentos que deseábamos que nos satisfacieran. Pobres de nosotros. La carta prometía, no era gran cosa, pero prometía. Sin embargo, la expresión "no era gran cosa" se hizo realidad. Yo decidí tomar una ensalada de primero y carne asada con salsa de nosequé (hace días que fui y casi no me acuerdo) de segundo. Además, el menú incluía pan, un champan sour y jugo de plátano. Bueno, nos trajeron algo a caballo entre el pebre y el salmorejo, una weá de la geofrafía española digna de ser catada si algún día viajan al sur de la Península Ibérica. Bien, nos gustó y estaba bueno, no hay queja. El problema fue la media hora que esperamos un amigo y yo por una ensalada y otros tres para que trajeran una crema de verduras. Cuando llegó ya no me quedaban uñas (ya no se si de los nervios o de hambre), por lo que me la comí como un demonio. Mi amigo, del norte de España, decidió dejar la ensalada a un lado y blasfemar sobre su sabor. No es para menos, la ensalada no era gran cosa, ni en tamaño ni en calidad. El caso es que tras la primera broma de la comida tuvimos que esperar cerca de 40 minutos para que llegara la segunda gracia de nuestro querido "risorante", por no llamarlo ristorante. Cuando un unicornio apareció, un cerdo voló sobre nuestras cabezas y el cometa Halley (creo que se escribe así) pasó sobre nuestras cabezas innumerables veces, por fin trajeron los ansiados segundos platos. Discúlpenme hacer esta apreciación tan propia del vocabulario español, pero la apariencia era "cojonuda", además de su sabor. ¡Qué bueno! Estaba muy bueno pero... pensábamos que habíamos ido a una comida, no a un menú degustación. En efecto, el segundo era escaso, incluso más que el primero. Mientras, el cocinero yo creo que se estaba riendo entre los fogones, me hubiera gustado volver a verme la cara. Cuando llegó ese segundo ansiado plato decidimos pedir más pan, pan que llegó no solo cuando acabamos el segundo plato, sino un minuto antes de traer el jugo de plátano que nos ofrecieron con el menú y que tuvo que pelearse con el postre para llegar primero a nuestra mesa. Con el hambre latente en la tripa y el pan (escaso eh, no os penséis que era una barra, ni mucho menos, rodajas cortadas con la precisión de un padawan) en una mano, rebañamos nuestros platos. El postre, cómo no. Otro detalle del minimalismo al que nos había acostumbrado ya nuestros amigos del restaurante más italiano de Valparaíso. Pedí un brownie con helado que comí en dos cucharadas (o tres, no me acuerdo bien). Además, comí el postre con una cuchara de la aerolínea española "Iberia". Tengo pruebas. El laureado escritor Dante Alighieri del siglo XIV podría haberse inspirado en nuestra comida para escribir la "Divina Comedia" en semejante local. PD: No dejamos propina, estaría cojonudo, vamos.Más
Fui con una amiga y nos encantó todo!! Es un lugar muy relajado!! Sin duda iría nuevamente a probar los ñoquis y el tiramisu!! Demasiado rico todo
Visitamos este lugar en 2 ocasiones la semana pasada. Ceviche de albacora con pepino muy fresco, sopa de lentejas, ñoquis sabrosos y epritivo de chardonnay sour muy correcto. Menu ejecutivo solo $5900 por persona. Gratisima experiencia Chef muy profesional.
Estuvimos la semana pasada en una visita por el día a los cerros de Valparaíso. Opciones hay varias en el entorno, pero nos aventuramos a entrar en este lugar. El recinto es pequeño, pocas mesas, pero tuvimos suerte al encontrar lugar. Las opciones del menú...están bien: aperitivo, jugo, entrada, fondo y postre, todo rico y en buenas porciones. La atención fue rápida, el trato sencillo, pero cordial y oportuno. Absolutamente recomendable a un precio más que justo. Debieran sí, tener habilitado servicio para pago con tarjetas.Más
El ambiente es muy rústico, la comida es de buena calidad. Buen menú, con razonable variedad. El servicio es muy lento y tuvimos varios errores en el pedido, aunque pudo deberse a que era una comida de trabajo y éramos más de 10 personas. Recomendable.
El local es pequeño, pocas mesas y el servicio es relativamente lento. La comida no es abundante pero de calidad, es recomendable para almuerzos (pero tenga paciencia). Volvería a ir.
Buenísimo , bien atendido .... Casi personalizado....rica la comida y perfecta presentación ... Un lugar cálido, pequeño y encantador .... Ah! El chardonnay sour muy fresco y suave !! Lo recomiendo de todas maneras !!!
El local solo trabaja con menú por lo que no existe carta, existen 2 opciones de entrada, fondo y 3 de postres. El precio bordea los 10 dólares por persona para un muy buen servicio, bonita presentación de los platos y de excelente sabor. Hay...una excelente relación precio/calidadMás
Riquísimo porciones adecuadas, buena atención rápido menús a precio razonables. Recomendable cien porciento