Pasamos una noche en Caminha haciendo el Camino Portugués por la costa y el restaurante Baptista fue todo un descubrimiento. La comida fue excelente y el trato aún mejor. Pedro y Manuel nos aconsejaron muy bien qué pedir y nos contaron la historia del restaurante...y de su tapa estrella Tábua de Polvo. Sin duda es un restaurante para volver! Espero que pronto puedan abrir en Madrid y poder disfrutar de su comida más cerca. Gracias!Más