Un local de una infraestructura no alucinante pero si novedosa. Me encanto la muralla de piedra que se nota construyeron el local sobre las piedras sin alterarlas. La cocina ahi mismo lo cual denota franquesa en la preparación y frescura de los platos.
Por mi parte consumimos ceviche de atun con arroz y salsa de frutilla, chupé de jaiba, salmón a la plancha con verduras. Todo muy rico lo cual se ve reflejado en el precio de cada plato.
Se recomienda pero tener en cuenta que no es lo mas conveniente de la isla.
Ademas no observe entrada para personas discapacitadas.
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