Nos fueron a recoger al aeropuerto y nos recibieron con un collar de flores, luego nos llevaron a recorrer la ciudad mostrándonos los principales negocios y sitios de referencia. Al llegar al hotel nos recibieron con un trago de bienvenida!! Un lindo detalle. Las habitaciones son amplias y cómodas, tienen frigobar donde puedes poner las bebidas que compres ( frente a las cabañas hay un mercado) pava eléctrica y ventilador. Aseo diario de la habitación
El desayuno correcto, algunas mañanas hubo café de filtro, otras sólo en polvo. Piña y sandía de fruta, quesos y fiambre, unos pancitos caseros muy ricos y la estrella del desayuno: el pie de maracuyá, delicioso!!
Las excursiones las puedes contratar allí mismo, nos vinieron a recoger puntualmente y la que no se pudo realizar por la lluvia nos la cancelaron sin ningún problema. La atención muy correcta por parte de todos los empleados. La única pega es el tema del wifi, que es un problema en la isla. La señall se corta los días de lluvia y no llega a la habitación, sólo en la sala de estar.
Recomiendo este lugar por la hospitalidad, las instalaciones y su ubicación.
