Nos hospedamos en abril de 2018.
Para destacar: la ubicación. Está a pocas cuadras de la Estación de Shibuya, en una zona tranquila. El servicio. El personal es muy atento y servicial. En la zona hay bares, supermercados.
Lo que no me agradó: el precio es caro en relación a la categoría. La habitación es más bien chica, nos tocó una habitación doble pegada a la pared. El baño es pequeño, pero completo.
En resumen, es un hotel recomendable.

Es un hotel sencillo para su precio, pero eso es habitual en Tokio, donde los alojamientos son muy caros. Está muy bien ubicado a pocas cuadras de Shibuya. Le doy 5 estrellas porque lo que más valoro en un hotel, hostal, etc. es la calidad humana de su personal. En este caso las recepcionistas (ambas mujeres) fueron extremadamente amables con nosotros. Hasta nos ayudaron a llevar las maletas al metro. Siempre nos dieron datos útiles para comer, pasear, etc. En Japón no se suelen ver demostraciones de afecto como en latinoamérica, pero en sus gestos demuestra un gran respeto y hospitalidad, este hotel lo refleja. Muy bien. Volvería y lo recomendaría.

No está mal, pero no me acaba. Fue uno de los alojamientos más caros donde nos alojamos en Japón (incluyendo Tokyo), pero no era de los mejores. El aire acondicionado no funcionaba muy bien. A parte de eso no tenía nada malo en particular, la habitación era grande y limpia, la cama cómoda, pero algo no nos gustó del todo de ese sitio, quizás el diseño del hotel que es bastante cursi. La zona está bien, al lado de Shibuya, pero en una calle tranquila así que no hay mucho ruido por la noche. Pero creo que por el mismo dinero se puede encontrar alojamientos mejores en Tokyo.