Estimados Yuri y Nat:
Llegamos de regreso a nuestra Argentina querida el viernes 26, felices de unas vacaciones que serán inolvidables para nosotros.
Pero, para comenzar por el principio, debemos decir que inmediatamente de arribar a Cancún, vía aérea, salimos del aeropuerto, no dirigimos a la empresa (MEX rent a car) donde habíamos alquilado en forma remota y digital nuestro carro. Pero nos desconocieron la reserva. Nos trataron mal y aún cuando les mostrábamos los comprobantes impresos de la misma, no nos respetaban el precio y la única solución que nos daban era alquilar algo mínimo por casi el tripe del valor pactado a través de “Despegar.com” …
Salimos totalmente indignados, decepcionados y sin rumbo …, pero apareció un personaje (“Patricio”) en la calle y nos hizo una oferta que, con cierto temor, aceptamos.
Ya en el carro, el GPS nos llevó a derivar de la autopista por calles inhóspitas, sin pavimento, internándonos en un lugar que a esas primeras horas de la noche parecía amenazante.
Nos invadió el temor de otra decepción. No obstante, a pesar de que parecía imposible encontrar algo bueno por allí, logramos llegar al frente de una gran casona, que nos era familiar por ser idéntica a la foto del anuncio de Despegar (un Bed & Breakfast, llamado YurInn). Nos bajamos del carro y a pesar de nuestra insistencia no logramos descubrir un timbre o portero eléctrico. Tampoco teníamos un teléfono de nuestros anfitriones.
Intentamos...Estimados Yuri y Nat:
Llegamos de regreso a nuestra Argentina querida el viernes 26, felices de unas vacaciones que serán inolvidables para nosotros.
Pero, para comenzar por el principio, debemos decir que inmediatamente de arribar a Cancún, vía aérea, salimos del aeropuerto, no dirigimos a la empresa (MEX rent a car) donde habíamos alquilado en forma remota y digital nuestro carro. Pero nos desconocieron la reserva. Nos trataron mal y aún cuando les mostrábamos los comprobantes impresos de la misma, no nos respetaban el precio y la única solución que nos daban era alquilar algo mínimo por casi el tripe del valor pactado a través de “Despegar.com” …
Salimos totalmente indignados, decepcionados y sin rumbo …, pero apareció un personaje (“Patricio”) en la calle y nos hizo una oferta que, con cierto temor, aceptamos.
Ya en el carro, el GPS nos llevó a derivar de la autopista por calles inhóspitas, sin pavimento, internándonos en un lugar que a esas primeras horas de la noche parecía amenazante.
Nos invadió el temor de otra decepción. No obstante, a pesar de que parecía imposible encontrar algo bueno por allí, logramos llegar al frente de una gran casona, que nos era familiar por ser idéntica a la foto del anuncio de Despegar (un Bed & Breakfast, llamado YurInn). Nos bajamos del carro y a pesar de nuestra insistencia no logramos descubrir un timbre o portero eléctrico. Tampoco teníamos un teléfono de nuestros anfitriones.
Intentamos hacer palmas y llamar a viva voz, pero nadie contestaba.
Finalmente, con un nudo en la garganta, cuando ya nos íbamos totalmente derrotados, intentamos tocando la bocina del automóvil …
Por suerte, desde la planta alta, por la ventana, apareció Yuri para luego abrirnos el portón eléctrico.
Con la atención Yuri y Nat, comenzó a abrirse para nosotros el Corazón de México, un país que no conocíamos, pero que ya no olvidaremos. Todo se aclaró y empezó a mejorar. Nos brindaron toda su hospitalidad en aquella hermosísima casa. Agradecemos la cena, las cervecitas y los suculentos desayunos frutales. También sus charlas y consejos, sin olvidarnos de los mimos de Betty (la mamá de Yuri).
Queríamos decirles que pasamos unos días estupendos, en Tulum, playa de Akumal, Isla Mujeres (playas Norte, Centro y encuentro con delfines en “Dolphin Discovery”, recorriendo la isla en carro de golf), Cancún Centro (y sus plazas) y Zona Hotelera, Chichen Itzá, Cenotes de Dzitnup (Samula y X´keken), Valladolid, Cenote Zaci...Más
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