Maravillosos días que pasamos con mi familia. Escuchar el sonido del Rio Cautín cada mañana, fue un lujo.
Sus dueños encantadores, un lugar para volver y quedarse un mes y mas.
Amplias habitaciones, todo muy pulcro,
Tienen unos helados de leche de cabra que son una exquisitez.
volveremos invierno 2021, si las condiciones sanitarias lo permiten.
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis