Un hotel en una zona tranquila y a una distancia aceptable del centro de Belfast (20-30 minutos a pie).
No puedo opinar de las zonas comunes ya que nos alojamos en un apartamento que se encuentra en otro edificio. El apartamento (de una habitación) es de un buen tamaño y estaba decorado con gusto, aunque el mobiliario estaba un poco descuidado teniendo en cuenta el precio. La cocina bien equipada con todo lo necesario para pasar unos días.
Al tratarse de un apartamento no pensabamos que el servicio de limpiezs estuviera incluido, algo que nos sorprendio, pero precisamente este "plus" es lo que menos nos gustó. No tenemos muy claro que incluia ya que unos días te hacian la cama y otros no, unos días cambiaban las toallas y otros doblaban las usadas como si fueran limpias...
El personas de recepción en nuestro caso fue muy amable tanto en el check in como en el check out y a la hora de proporcionarnos tantos bonos como necesitabamos para el wifi.

Suelo alojarme en este hotel por cercanía con la universidad. El hotel es correcto y lo puntuaría con un 4 si no fuera por que a veces hay pequeños detalles, algunos ya descritos en las opiniones que he leído de este hotel, que no están al nivel que se supone para este hotel.

Importante destacar que dispone tanto de hotel como de apartamentos (a dos portales de distancia, no a cinco minutos como he leído en alguna opinión) que están bastante bien para estancias más prolongadas o si vas de vacaciones, que siempre viene bien tener un frigorífico y no ir siempre a un restaurante!

El trato en general es amable, es cierto que alguna vez me he encontrado con alguien que no rebosaba simpatía en el turno de noche, pero es que esto os puede pasar en cualquier lado. Como detalle os puedo contar que en mi última estancia me hicieron pagar por adelantado las dos noches de hotel que iba a estar (la primera vez en unas 6 que he estado en este hotel) y, sorpresa, me hicieron una precarga de 50 libras por solicitar el wi-fi. A pesar de mi sorpresa la verdad es que no manifesté queja, y sin embargo alguien del hotel debió recapacitar, porque en el check out me comentaron que no me iban a cobrar los dos días de wi-fi...(alguien se debió dar cuenta de lo que pasó en en check in...). Estos son detalles que un hotel debería evitar con alguien que empieza a ser usuario frecuente del hotel.

Para los que viajan por negocios comentaros que el hotel no admite bono a través de transhotel. Aunque la agencia de viajes os haga la reserva o paga directamente la agencia con visa o tendreis que pagar vosotros en el check out.

La habitación del hotel está bien, en general amplia y limpia. En esto doy la razón a la Guía Michelin que lo tiene como hotel con encanto. Es cierto que la experiencia cambia mucho cuando te dan una habitación u otra, porque alguna vez me he encontrado con el famoso ruido nocturno del que habla otros de los usuarios que han comentado su estancia en este hotel.

Cuando llegué no nos dieron la bienvenida de forma respetuosa. El personal de recepción fue muy rudo y nada atento. Me dijeron que nuestro apartamento estaba a cinco minutos andando. Mi amigo y yo teníamos muchas maletas. Les preguntamos si debíamos coger un taxi. La señora de recepción daba la sensación de que no quería que la molestasen teniendo que llamarnos un taxi y nos dijo "bueno, es sólo un corto paseo". Pues bien, el trayecto era corto pero la carretera era muy enrevesada. Fue muy difícil abrirnos paso por ahí (en ningún momento se ofrecieron ayudarnos). Cuando reservé la habitación me dijeron que los trámites de ingresos serían rápidos. No fue así porque nos dijeron que teníamos que esperar una hora. Después de hacer los trámites de ingreso fuimos a la habitación y notamos enseguida que apestaba a tabaco y que las alfombras estaban viejas y en mal estado. Tras una posterior inspección encontré que el cable no funcionaba (no lo arreglaron ni siquiera después de que me quejara), la ducha tenía muy poco agua caliente, y las camas eran como las que encuentras en un motel. Después de ver todo lo bien que hablaban de este lugar en las reseñas, quedé muy decepcionada. Pues bien, eso no fue lo peor. Pocas horas después de nuestra llegada recibimos una llamada de dirección. Me dijeron que habían oído comentarios de que se estaban llevando a cabo actividades impropias en mi habitación. Sólo habían venido dos amigos nuestros y estábamos viendo un DVD en el salón y no estábamos molestando a nadie en absoluto. Estoy muy confusa por todo el asunto. La señora de recepción nos dijo que habían tenido algunos problemas en el pasado y que desde entonces tenían que tener mucho cuidado con la gente que entraba en las habitaciones. Me preguntó si mis amigos eran hombres. Le dije que si (no podía creer lo que estaba oyendo). Créeme no estábamos haciendo nada malo, pero, aunque así fuera... ¡qué es esto, los años 50?). Me dijo que quería que hablara con la policía. Le dije que no tenía ningún problema al respecto y que no tenía nada que esconder (esta amenaza no prosperó) esta llamada de teléfono me dejó estupefacta, desconcertada y, bueno... también descolocada. Optamos por irnos. Es un lugar raro. Por lo que yo viví no se parece en nada a lo que dicen la mayoría de los reseñistas.