Para nosotros es un imprescindible.
Ubicación en el monte, rodeados de verde, comer en las mesas de fuera es lo mejor si hace bueno, aunque en esta ocasión nos toco en las que están dentro de las cristaleras, pierde un poco la gracia y sales bastante ahumado.
La txuleta (45€/kg) esta muy buena pero es que la ensalada mixta es un disfrute, aunque por los 15€ que cuesta, no espero menos.
Y de postre, un valenciano. Una comilona de las que no se olvidan.
Totalmente recomendable.
No le pongo las 5 estrellas, porque los precios hacen que sea algo para no repetir tanto como nos gustaría.