Es nuestra segunda visita al lugar, la primera en su interior y la presente en la terraza porque la calefacion invitaba y fue un acierto.
Aparte de su comodidad del lugar tan céntrico tienen unos camareros súper atentos y con buena atención y se les nota que están bien en su puesto pues te contagian alegría,
Y lo más importante fueron sus platos: una paella de marisco inmejorable ( para repetir), pedimos chuletón gallego y fue un pleno acierto, nuestros acompañantes saborearon una pierna de cordero que les ha entrado ganas de repetir, la próxima semana quieren regresar, CONCLUSION: INMEJORABLE,,, y de precio esta en su cuantía de calidad/precio acertado.
Enhorabuena y no cambiéis. Muchas gracias por toda vuestra atención, feliz año. Hasta muy pronto pronto