Muy buen ambiente para disfrutar de unas tapas. Nos gustaron especialmente los dados de brie, y muy buena paella a un precio ajustado. Tiene la terraza en Plaça Revolució, así que perfecto para estar fuera!

Las croquetas de pollo asquerosas. Mal hechas.
La camarera (no española) una impertinente. Mal educada, ha llegado a despreciarnos a varios de nosotros sin motivo alguno. Sin duda, no volveré ni lo recomiendo. Comida de mala calidad y caro

Venimos aquí a ver los partidos del Barça. Las tapas están bien y los precios ajustados.
Los días de partidos importantes (clásicos, Champions...) se pone a reventar y hay que llegar con tiempo. Esos días también los camareros y camareras van bastante a tope, con lo que tardan bastante en tomarte el pedido y traerte las cosas, pero se entiende.

Trato denigrante, nos han echado de la mesa teniendo la cerveza sin tomar...
Nos dijeron que si no cenábamos a las 8 de la tarde, no podíamos quedarnos.
Muy desagradables!!!!!

Recibimos un trato denigrante.
Depende de lo que comas puedes estar en la terraza o no. El camarero nos intimidó para que nos fuéramos faltandonos al respeto porque necesitaba la mesa, cuando aún no habíamos terminado.
Con ese mal trato, no creo que se recupere la hostelería.
El último restaurante de Barcelona que recomendaría.