En la zona de Rambla Catalunya no es que abunden los sitios de buen comer (está muy orientado al turismo-de-Paellador), por lo que fué una sorpresa encontrarnos con uno que anunciaba Cocina Catalana. Entramos con cierto resquemor (cerca, en Ronda Universitat, hay uno que anuncia Cocina Casolana y es básicamente una pizzería), pedimos calçots, sopa de escudella y alcalchofas y, a pesar de que no soy muy amante de las alcachofas (las únicas que me gustan son las de la ducha, mea culpa) estaba todo bastante bueno. A nuestro lado, una solitaria turista oriental degustaba un arroz negro y no paraba de alabarlo. Un sitio muy, muy agradable
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