Las habitaciones son amplias proporcionando un ambiente agradable para descansar. Sin embargo, considero que hay áreas que requieren atención para mejorar la experiencia de los huéspedes.
El servicio de restaurante es uno de esos aspectos que podría beneficiarse de una revisión. Aunque la variedad del menú es apreciable, me gustaría señalar la falta de opciones adaptadas para personas que no consumen lácteos o harinas blancas, lo cual podría limitar la satisfacción de algunos comensales. Un enfoque más inclusivo en la gastronomía sin duda enriquecería la oferta del hotel.
Adicionalmente, la atención al usuario podría ser más proactiva. En más de una ocasión, noté que el personal parecía abrumado, lo que generó tiempos de espera prolongados y una sensación de desatención que, en un hotel de esta categoría, debería evitarse.
Por último, la disponibilidad de agua de cortesía y productos de minibar en las habitaciones es un pequeño gran detalle que marcaría la diferencia en la percepción del servicio. Considerando que se trata de un hotel 4 estrellas, estas atenciones son esperadas y mejorarían la experiencia general.
En resumen, el Hotel Allegro Murcia tiene una base sólida, pero tiene el potencial de elevar su servicio a la altura de su categoría. Recomiendo este establecimiento a aquellos viajeros que busquen comodidad y un ambiente acogedor, pero sugiero tener en cuenta estos aspectos para una experiencia completamente satisfactoria.