El hostel es uno mas de la cadena St. Christopher, y mantiene como todos el bar en la planta baja (Belushi), lo cual lo hace muy conveniente a la hora de comer o tomar algo. Con el checkin te dan una pequeña libreta que sirve de descuento en el bar, y los precios quedan muy accesibles. El bar en si está muy bueno y las hamburguesas son excelentes, es ahí además donde se sirve el desayuno por las mañanas, que está muy bien y te mantiene con energías hasta el mediodía!
A eso de las 2 AM cierran las puertas del bar y sólo entran huéspedes, lo cual es conveniente dado que sino el ruido del patio del hostel se escucha desde las habitaciones que dan a esa parte, y quizá resulta un poco molesto para los que tienen sueño liviano y se acuestan temprano.
Yo me alojé con un amigo en una habitación privada. Por ser un hostel las camas estaban bien, la limpieza correcta y nos resultó espaciosa. El único punto flojo es el baño. Estaba limpio, pero muy pequeño. Mas allá de eso no hay que olvidar que se trata de un hostel.
Lo recomiendo si el plan es ir a disfrutar la vida nocturna de Amsterdam y estar perfectamente ubicado para tal fin. Incluso se puede ir caminando hasta Amsterdam Centraal. Volvería.