El precio no es para lo que existe. Si bien la casa es de adobe y recuerda las casas de antaño, tiene potencial para mejorar. Es fresca en verano y las habitaciones acogedoras, pero no tienen baños privados, además faltan terminaciones en los baños, cerámicos rotos, piso de batuco, se mancha todo rojo -debe ser más prolijo en terminaciones, por la higiene -una cosa es mantener la antigüedad de la casa como patrimonio y otra cosa son detalles de lugar terminado). La casa tampoco tiene cocina instalada (cocina, refrigerador, horno-microondas, lavaplatos muy pequeño, se nos hizo un poco incómodo. Fuimos un grupo de 23 personas entre adultos y niños, si bien nos ayudaron a traer 1 cocina, frigobar, un freezer, instalar un comedor en la terraza (el tiempo en verano se puede, porque el comedor adentro no hubiésemos cabido), con todo nos fuimos arreglando. La piscina y hot tub muy agradable. En el patio y alrededores se encuentran escombros y vidrios. Se puede llegar a un tranque. El lugar precioso, pero sin muelle, nuevamente escombros. El dueño muy dispuesto a ayudar, mientras que la dueña no.