Admirar una noche estrellada en el desierto es un recuerdo inolvidable para cualquier pareja. No sólo puedes disfrutar esta vista desde la cama de tu habitación de El Huarango, sino también desde una hamaca, banca o silla al exterior. Por las tardes, los caminos iluminados por lucesitas LED, el comedor exterior con velas y bajo un tamarugo y la calidez de sus dueños son sólo algunos de los detalles que lo vuelven un entorno mágico.
Coca y Marco, sus dueños, te darán una cordial acogida. Responden ante cualquier duda, te dan ideas turísticas y están dispuestos a ayudar. La ambientación es cálida y sus habitaciones están día y noche a buena temperatura. Tanto los detalles de interior como arquitectónicos te invitarán quedar una noche más.
Esto hace de El Huarango un lugar único en la Pampa del Tamarugal, e incluso en el norte de chile. Su estilo es el resultado de minucioso trabajo y detalles innovadores que muestran su preocupación por el viajero. A esto se suma la vivencia de ser protagonista de una vida ecológica: el uso de materiales naturales y reciclados, la reducción del impacto medioambiental y la utilización de energía solar en todas sus formas.