Está ubicado al borde del centro, a unos 500m de las estaciones del tren y de autobuses.
El edificio tiene doce plantas.
No todo el personal de recepción es amable y eficiente.
Tiene dos ascensores lo que es insuficiente. para las horas de más movimientos.
Los pasillos están bien iluminados y las habitación bien identificadas.
La habitación para uso individual tiene unos 20 m2.
Tiene una distribución cómoda, muy ajustada.
La cama de 1,5m era y la única almohadas era demasiado alta y vieja.
La insonorización no era buena, se oía el ruido interior y exterior.
La iluminación no era muy correcta en la habitación y se podía dejar a oscuras.
El mobiliario era básico y estaba en buen estado.
La TV era de unas 42" y tenía numerosos canales en eslovenos, italiano, francés, alemán, español, etc.
Había un equipo individual de aire acondicionado que se podía regular. No así la calefacción, que no había mando alguno para regularla.
El baño era cómodo. Su iluminación era correcta. La grifería funcionaba correctamente y las toallas eran correctas.
El desayuno era correcto para esta categoría, pero la sala era pequeña y estaba congestionado.
La wifi no funcionaba muy bien pues era lenta aunque se podían conectar varios dispositivos.
En resumen, un hotel regular para esta categoría.