Un hotel bonito y cómodo. Tiene muy buena ubicación dentro de la ciudad. Me parece que está adecuado más para realizar eventos corporativos. No es un lugar realmente espectacular y no tiene el mejor costo-beneficio. Es menos de lo que busca aparentar.

El servicio en la recepción me pareció flojo, lento y arrogante.

Había oído mucho sobre el buffet de desayuno... me pareció muy abundante, pero no de la mejor calidad.

Dentro de la misma calificación y rango de precio en hoteles, sin duda hay mejores.

Ha desmejorado mucho.
Suelo venir con frecuencia al Spa y esta vez nos alojamos una noche. Las Habitaciones están pasadas de moda, el Restaurante el Circo nada especial, regular servicio (a excepción de Danilo quien fue muy amable) y exageradamente costoso. Por ejemplo Una ginebra vale 43.000 pero adicional cobraron 17.000 por una tónica…. Es en serio?

Con tanta competencia en Bogotá, el JW esta abusando con los precios, para no estar renovado en absoluto.