Con respecto al lugar, no tengo ninguna queja porque el sitio es muy bonito, lo tienen muy bien cuidado y es un lindo lugar para pasar una tarde de domingo, sin embargo la comida no tiene nada de especial y menos la atención o los precios.
Dada la contingencia, tienen la carta super reducida, los precios son super elevados y la comida no es espectacular. El plato "de la casa" es una tira de lomo de res dura, sin sal, fría y con una papa chorreada...esto por $46.000 se me hizo super caro.
Los meseros no son atentos ni están pendientes de las mesas. El servicio honestamente dejó mucho que desear.
No se si volvería...tal vez porque el lugar es muy bonito, pero no precisamente por la comida
¿Es el propietario o administrador de este establecimiento? Solicite su perfil gratis para responder las opiniones, actualizar su perfil y mucho más.