Un hotel muy agradable y acogedor, buena atención , deliciosa la comida, desayuno muy completo recomendable para ir a descansar y disfrutar en un ambiente tranquilo, despertar con el sonido de los pajaritos o disfrutar en las tinajas con una vista genial al volcán y si bien la ubicación no es el mismo centro de pucon está a 5 minutos en vehículo.

Pésimo desayuno, variedad, no conocen esa palabra en este hotel. Frutas desabridas, piña sin sabor, kiwi lo mismo en 3 desayunos, en el 4to desayuno, agregaron melón, duro y sin sabor. Desayuno asistido, parece mas que para ahorrar y controlar que no se coma demás. Increíblemente tenían jugo ENVASADO, lo que me esperó es que sean naturales? Dulces poca variedad, medialunas o “empanadas” de manzana o crema pastelera, era uno u otro y cambiaban los día por medio. Intolerante a la lactosa? Cero productos sin lactosa disponible. 1 tipo de cereal, zucosos, nada más. Pan 3 variedades, parecían añejos, el pan integral, supuestamente era integral. Vasos de cartón y cucharas de cartón, para que? Si habían platos, cuchillos, tenedores normales. Había un chico que te asistía, bien amable, pero había otro que le faltaba la delicadeza de atender bien. Desayuno nota 1 de 7. Habitación con minibar, desconectado y vacío. Televisión, de hace 5 años atrás sin conectividad para iniciar Netflix’s u otro servicio, desde la cama había que ver con binoculares, no voy de vacaciones a ver tele, pero al llegar tarde antes de dormir, en fin. Para ser 4 estrellas, diría que le sobran un par.