Hemos visitado varias veces estás cabañas. El lugar es de ensueño, increíble vista al volcán, amplios terrenos. Cabañas prudentemente aisladas. Punto aparte es la piscina, muy limpia y en medio de árboles con vista a las araucarias en el horizonte. La atención de los dueños es un 10, todo muy organizado, dejan todos los días el desayuno muy temprano y el cambio de toallas no falla. Aceptan mascotas.
Cabañas impecables, wifi de alta velocidad y TV cable. Tal vez el único punto a mejorar sería el baño, que si bien estaba impecable, tiene la ducha muy pequeña.
Volveremos sin duda.