Carolina es una genia! Me encantó el lugar. Es impecable. Vista panorámica a Puerto Montt. Buena calefacción y la sensación de sentirte como en casa. Limpieza y desayuno 11 puntos! Espero volver pronto
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis
Carolina es una genia! Me encantó el lugar. Es impecable. Vista panorámica a Puerto Montt. Buena calefacción y la sensación de sentirte como en casa. Limpieza y desayuno 11 puntos! Espero volver pronto
Los paisajes del Sur de Chile y la hospitalidad, preocupación y alegría de Carolina (dueña del hostel) hicieron de nuestra estadía un sueño! Nos encantó el ambiente/vibra de la hostal, muy familiar, animal lovers, ricos desayunos, bella vista, todo fantástico, realmente! Sinceramente cuesta dejar ese lugar. Gracias por todas sus atenciones, volveremos de todas maneras!
excelente lugar para relajarse, el domo es maravilloso, los animales le dan un toque especial a la hostal, el desayuno es genial, volveria a ir en familia y con pareja. La cuidad tiene su encanto y vida nocturna, me quedo con lo vivido en la hostal que fue una maravillosa experiencia a repetir con un grupo de amigas en el Domo, como me toco vivir un grupo de extranjeros que arrendaron el Domo y se noto que lo pasaron maravilloso sin interrumpir al resto de los que estábamos alojándonos ahí. La gata de la Hostal baila el caño es única en el mundo, realmente me encanto la hostal, me transportaria y volveria a estar ahi.
Típico ambiente sureño, seguro, acogedor y relajado. Ubicación accesible atendida por su propia dueña. Un lugar con una vista a la ciudad y al mar maravillosa, simplemente es un hostal recomendable al 100 %
hostal bien atendido buenas instalaciones, muy bien ubicado a minutos del centro, excelente vista de la ciudad de puerto montt, la dueña simpatica y amable, cordial trato y ambiente familiar, barrio tranquilo
es un lugar cálido y acogedor muy familiar las piezas son amplias y en buen estado 100% recomendable para llegar a descansar después de pasear, los desayunos son exquisitos y lo mejor que es atendida por su propia dueña