Es un hotel muy bonito y juvenil, la habitación es pequeña pero muy bonita y elegante, el baño super cómodo, grande y moderno, con cafetera nespresso y frigobar. Hay bata de baño y pantuflas. El desayuno buffet es bueno y cuentan con bares muy amenos con excelentes bebidas y variedad de cervezas. Esta ubicado en Las Condes el mejor barrio de Santiago, al lado de restaurantes, tiendas de conveniencia, casas de cambio y desde el hotel se ve el Costanera Center. Los colaboradores son amables y también te dan opción de tour, con ellos tomamos el del Viñedo Concha y Toro, excelente y además el chico que nos dio el tour es super amable y confiable, muchas gracias Rafa por tus atenciones siempre lo voy a recomendar al igual que al hotel, espero volver pronto.

Este hotel es ideal para quienes van en plan de trabajo.
Ubicado en una zona muy linda de Las Condes, a tan solo media cuadra de Avda Apoquindo, metro Tobalaba y a 3 cuadras de Isidora Goyenechea, y plaza Perú.
Zona de oficinas en su gran mayoría y a unas 6/7 cuadras del mall Costanera center.
También si vas en plan relax, aunque los fines de semana, es bastante solitaria la zona como para andar, sobretodo del lado de Avda Apoquindo.
Hay un par de lugares para comer algo liviano en las cercanías al hotel.
Respecto al hotel, es muy limpio y moderno, cuenta con parking A DISPONIBILIDAD.
Tiene gimnasio, pero no lo hemos usado. 3 ascensores, modernos y super silenciosos.
Las habitaciones alfombradas ( doble, en mi caso) cumplen funcionalmente con todo, aun así es muuuuy pequeña, pero tiene espacio de guardado de maleta, una pequeña tabla de apoyo, mesa de noche, un puff, armario y caja de seguridad.
Tienes frigobar, y una nespresso en la habitación. Los consumos no están incluidos en la tarifa.
Nos facilitaron una pava eléctrica para nuestro uso durante la estadía.
El baño es pequeño, con artefactos modernos, la ducha muy buena. Muy buen secador de pelo.
Hay una obra detrás, y no se escucharon los ruidos, por lo que la acústica es muy buena.
Tiene desayuno, sencillo, pero cumple bien. Cafe nespresso, comun y te, que te sirven a tu mesa.
Incluye un poco de queso, salame y jamón. Tomate y muzzarella. Huevo revuelto y panceta.
Algunos panecillos, pan cuadrado y tostadora.
Tambien una mesa dulce con ricos budines, facturas vienesas, yogurt, cereales, y algo de fruta.
Los meseros vienen a tu mesa y te dejan un papel para que anotes la propina que quieres dejarle. Nunca nos había pasado antes, y siempre consideramos que las propinas son a voluntad, según el servicio recibido al final de la estadía. Ni bien, ni mal, pero diferente, nos llamo la atencion.
Destacamos sobremanera el servicio de Alejandro en el desayuno ( y una niña que estaba con el que no sabemos su nombre) y en el front desk a Javiera, super amable en todo momento y a quien nos facilitó la pava eléctrica (Facundo?) lamentamos no recordar su nombre.
Nos permitieron un late check out y guardado de maleta.
Hemos pasado una muy agradable estadia en el hotel.
Sin duda lo recomendariamos.

Excelente la ubicacion, la atencion de todos desde que abren la puerta hasta la ultima persona en servirnos , me prestaron un cable para la carga de mi celular. Limpieza , desayuno, gym de 10. Me hubiese gustado usar el jacuzzi , ( tenia que abonarlo ) Lo super recomiendo.