No puedo ponerle 1 estrella por toda la historia que antecede a este gran y mítico lugar. Pero ocurre, que sus preparaciones son cada vez más insípidas y destartaladas. Es cierto que se van modernizando y tienen una carta cada vez más amplia tratando de llegar a todos los gustos, y ahí es que me queda la sensación de el que mucho abarca poco aprieta. Insistí en darle una y otra oportunidad al lugar, por el cariño de sus vienesas dominó cargadas a la mayo, o la vienesa a lo pobre, y el resultado sigue siendo el mismo, cada día más malo. Ni esl sabor ni la presentación es la misma. Mejor por lejos la fuente alemana, mardoqueo o inclusive algo más nuevo como es la mechada nacional.
No lo recomiendo para nada, por precio, no lo vale.