Vamos todos los años porque el servicio siempre es excelente, pero en esta visita encontré que cambiaron varias cosas que no me gustaron:
La primera es que el desayuno ahora es tipo buffet y en comparación a como lo servían antes, bajo mucho la calidad. Pasamos como a las 10:00 am y ya estaba muy desordenado, algunos alimentos tenían mala presentación (el pan estaba duro, los platos de queso desordenados, los huevos no se veían muy bien, platos con restos de comida)
Lo otro es que eliminaron el secador de pelo en el baño de mujeres, y como siempre había estado ahí yo no empaqué el mío contando con esto.
El restaurante en el horario nocturno bajo demasiado la calidad de los tragos. Voy todos los años y estoy acostumbrada a que me sirvan bebidas increibles y balanceadas en sabor, pero esta vez fue muy decepcionante. Pedimos un Mai Tai que sabía a naranja con ron, un whiskey sour que sabía a puro whiskey y la espuma estaba super mala, un mojito que dejó mucho que desear, etc. Realmente ninguno estaba rico. También se equivocaron 2 veces en lo que pedimos. (primero me trajeron un tártaro habiendo pedido un ceviche y al final me trajeron un postre que tampoco era el que yo había pedido)
Destaco que como siempre todo el personal es sumamente amable, simpáticos, con buena disposición para ayudarte en todo lo que necesites. Mucho mejor que en cualquier otro lugar.