Mi experiencia en Machu Picchu y el Valle Sagrado fue simplemente espectacular. En solo dos días, pude sumergirme en la rica historia, cultura y belleza natural de esta región icónica del Perú. Comenzamos nuestro recorrido visitando sitios arqueológicos como Moray y Ollantaytambo.
Nuestra guía Aiben Puma fue excelente, compartiendo datos históricos y respondiendo a todas nuestras preguntas. Las vistas desde las terrazas agrícolas eran impresionantes, y la guía nos explicó detalles fascinantes sobre la vida de los incas. Además, a mi mamá le encanto la visita a un mercado local donde compramos recuerdos únicos y probamos productos tradicionales.
El almuerzo en el Valle Sagrado fue increíble: disfrutamos de un buffet con platos típicos peruanos. Todo fresco y delicioso.
Machu Picchu fue sin duda, el punto mas emocionante del tour. Tomamos el tren temprano desde Ollantaytambo hacia Aguas Calientes, disfrutando del paisaje espectacular durante el trayecto. Nos quedamos en un hotel llamado Tara muy bonito, pasamos la noche ahí, todo muy tranquilo y perfecto.
Al otro día, madrugamos a Machu Picchu, subimos en bus y luego caminamos. Recorrer la Ciudadela, el Templo del Sol y las terrazas agrícolas fue una experiencia surreal. La majestuosidad del lugar me dejó sin palabras.
Lo que más me gustó:
• La organización y puntualidad de las excursiones.
• La amabilidad del guía y su conocimiento profundo de la cultura inca.
• La comida local, que fue una delicia en cada parada.
• El paisaje: desde los Andes hasta la selva, cada rincón era digno de una foto.