Hotel Natalino Patagonia: el peor alojamiento Viajamos desde Concepción a Puerto Natales a celebrar nuestro aniversario de matrimonio por una semana, y tomamos la pésima decisión de alojarnos en el Hotel Natalino Patagonia. Las situaciones incómodas empezaron en cuánto llegamos y no terminaron hasta que nos fuimos. Al llegar a este alojamiento después de un agotador viaje desde Punta Arenas, nos informan que no estábamos registrados en ninguna habitación, siendo que la reserva se había coordinado con días de anticipación. Nos indican que seguramente estábamos equivocados de hotel. Al rato después encontraron el correo con la información de la reserva, el cual se había omitido. Cabe destacar que la solicitud se había hecho a la gerente del hotel, dada la ocasión especial; la cual claramente no hizo bien su trabajo. Por parte de las recepcionistas nos pidieron disculpas y nos dieron explicaciones, pero esta persona en ningún momento salió de su oficina y se hizo responsable ante esta situación. Llevamos nuestras pertenencias y las maletas a la habitación, y salimos a hacer algunas consultas. Al llegar nuevamente a la pieza e intentar abrir la puerta, la llave no funcionaba, estando varios minutos con la recepcionista probando todas las tarjetas que tenían para lograr abrir. No tuvimos resultados en un buen rato y estábamos muy nerviosos por nuestras cosas que se encontraban adentro. Luego de múltiples intentos, una vez que logramos abrir por fin, sacamos las cosas y solicitamos el cambio...Hotel Natalino Patagonia: el peor alojamiento

Viajamos desde Concepción a Puerto Natales a celebrar nuestro aniversario de matrimonio por una semana, y tomamos la pésima decisión de alojarnos en el Hotel Natalino Patagonia. Las situaciones incómodas empezaron en cuánto llegamos y no terminaron hasta que nos fuimos.

Al llegar a este alojamiento después de un agotador viaje desde Punta Arenas, nos informan que no estábamos registrados en ninguna habitación, siendo que la reserva se había coordinado con días de anticipación. Nos indican que seguramente estábamos equivocados de hotel. Al rato después encontraron el correo con la información de la reserva, el cual se había omitido. Cabe destacar que la solicitud se había hecho a la gerente del hotel, dada la ocasión especial; la cual claramente no hizo bien su trabajo. Por parte de las recepcionistas nos pidieron disculpas y nos dieron explicaciones, pero esta persona en ningún momento salió de su oficina y se hizo responsable ante esta situación.

Llevamos nuestras pertenencias y las maletas a la habitación, y salimos a hacer algunas consultas. Al llegar nuevamente a la pieza e intentar abrir la puerta, la llave no funcionaba, estando varios minutos con la recepcionista probando todas las tarjetas que tenían para lograr abrir. No tuvimos resultados en un buen rato y estábamos muy nerviosos por nuestras cosas que se encontraban adentro.

Luego de múltiples intentos, una vez que logramos abrir por fin, sacamos las cosas y solicitamos el cambio de habitación. En esa situación aparece la gerente del hotel (o al menos eso creemos, porque en ningún momento se presentó), quien intentó abrir varias veces para encontrar una justificación y sólo hizo demorar más tiempo el cambio de habitación. Ya era el segundo evento que ocurría y su actitud dejaba bastante que desear. No pidió disculpas ni asumió los errores. Con suerte nos habló para demostrar que la puerta supuestamente funcionaba.

Algunos recepcionistas se esforzaron que los días siguientes fueran un poco mejores, destacando a Rocío, quien nos ayudó bastante y tenía buena disposición.

La peor situación sucedió la última noche. Teníamos que despertarnos a las 6:00 am, pero cerca de las 4:00 am una pareja en estado de ebriedad abre la puerta de nuestra habitación con otra tarjeta e ingresan. Despertamos repentinamente, desorientados, asustados y gritando; creyendo que nos habían entrado a robar. El recepcionista (que era un practicante y lo dejaban solo durante las noches), le entregó la llave de nuestra habitación a unos desconocidos por error, vulnerando gravemente nuestra privacidad (omitiremos acá el resto de los detalles). No pudimos dormir en lo que quedaba de noche por toda esta situación y estuvimos varios días afectados por esto.

Cómo viajamos por una agencia, exigimos que se levantara el reclamo formal y ellos vieron todo este tema. Finalmente, luego de varias reuniones con la gerencia del hotel y del holding por parte de ellos, lograron que nos devolvieran solo dos noches. Hasta hoy, ningún contacto directo por parte del hotel para disculparse o dar alguna explicación.

Además de estas graves situaciones, consideramos que lo más terrible es la actitud y las competencias de la gerente. Nunca dio la cara por todos los errores, cuando apareció solo fue para decir que estábamos equivocados e inventó una serie de cosas para dejarnos mal a nosotros. Asimismo, aún no entendemos cómo es posible que hayan dejado a un practicante solo en los turnos de noche a cargo del hotel.

Complementando, las habitaciones eran pequeñas y ruidosas, se escuchaba todo lo de los pasillos a un alto volumen (había mucho eco) y también de las habitaciones de los lados. Lo único bueno era la amabilidad de algunos recepcionistas, los desayunos y su piscina. Lo que cobran no se justifica para nada, de hecho, su página web hace parecer un hotel de lujo; estando muy lejos de eso.

Hemos tenido la suerte de viajar mucho por diferentes partes del mundo, pero por lejos ésta es la peor experiencia que hemos tenido.
Jamás volveríamos y los invitamos a nunca hospedarse en este “hotel”.Más