El hotel seguramente tuvo su esplendor hace muchos años. Desde entonces, el mantenimiento ha sido mínimo.
Lo bueno: Muy linda vista, buena ubicación y muy buena atención de Eddy en la recepción y en el proceso de reserva.
Lo malo: paredes muy delgadas y cañerías viejas lo hacen muy ruidoso. (Si vas en plan descanso y de levantarte tarde, piénsalo un poco más)
El baño normalillo, sin secador de pelo (pero si pides te dan), con el clásico sachet de shampoo y jabón redondo de barra. Toallas estaban bien y la ducha con un buen chorro de agua.
El desayuno es “normal”. Nos dijeron de 6 a 10 am, pero al llegar a las 6 no había nadie. Igual el nochero nos dejó pasar y autoatendernos, hasta las 6:20 que llegó la chica.
Sumando y restando, volvería dependiendo del precio. Esta vez pagué CL$82.400 por noche para 3 personas en temporada alta.Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis