Muy buena ubicación, se puede ir paseando al centro de Puerto Natales, pero está a las afueras y con unas vistas fantásticas. Nuestra habitación era una superior con vista a fiordo: muy agradable, luminosa, con un gran ventanal (¡aún podían haberlo hecho mayor!) que daba al fiordo y parecía un cuadro. Algún pequeño fallo, como la altura de los colgantes para chaquetas o pantalones, que es insuficiente; y se echan de menos unos colgantes encima del radiador para poder colgar ropa de paseo húmeda (llueve bastante).
El personal es muy amable y eficaz, especialmente las chicas de recepción. Muy dispuestas a ayudar y facilitar lo que necesites; en especial Catalina, Maira, Ariela y Coni..
Zonas comunes agradables, con WiFi que funciona decentemente.
Lo más negativo: la calidad del desayuno, que no concuerda con la calidad del lugar. Tampoco la calidad del restaurante es buena: sobreprecio y muy mediocre. Se come mucho mejor en muchos otros lugares de Puerto Natales, y a mejor precio.Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis