Fuimos al medio día. Había poca gente y fuimos atendidos por su dueño Juan Antonio que muy cálidamente nos recibió y aclaró nuestras preguntas. Pedimos limonadas de jengibre y de menta, exquisitas y súper refrescante. Los jugos naturales riquísimos. Unas tortas fritas como entrada mientras esperábamos las pastas ( un capítulo a parte
100% caseras), comimos fideos a la boloñesa, ñoquis de camote y sorrentino de pulpo con salsa de quesos increíbles.
Los precios son un poco más económico que en la calle central y/o las caletas. Si te gusta la comida Iraliana con influencias Rapa Nui, tienes que visitar este lugar. Tambien tienen opción de pizzas al horno de barro y Ceviches. Seguro que antes de abandonar la Isla volveremos
No dejes de probar sus exquisiteses no te arrepentiras
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