Si existe un paraíso en la tierra, definitivamente estaría justo en OCEAN Z, este hotel es un templo a la tranquilidad, buen gusto, descanso físico y espiritual, armonía, atención personalizada, belleza en todos los sentidos. Hemos visitado gracias a Dios muchos hoteles hermosos en nuestra vida pero jamás ninguno nos ha dado la sensación imperiosa de regresar como en OCEAN Z. El lugar es una postal, tener un desayuno frente a esas aguas turquesas es una experiencia única. Gracias a todo pero todo el staff, Andreina, Carlos, Niurka, Jimmy, Jesús, Talhasee, (disculpen si no lo supimos escribir) y al señor que nos ayudaba a preparar nuestras cavas para ir a disfrutar del mar, Carlos hasta nos fue a llevar la comida en Arashi beach, un lujo de atención. La comida es lo máximo... hamburguesas, los desayunos con mucha fruta, las cenas espectaculares, ufff. Tienen hasta noche de sushi, lamentablemente nos lo perdimos pues son los viernes, deberían ser 2 a la semana, jajajajaja.
Pasamos el cumpleaños de Eva mi esposa en el lugar y nos hicieron sentir mejor que en casa, nos pusieron una torta decorada que hicieron con dulces, toallas y chocolates, y nos hicieron una torta de cumple con frutas, la verdad no escatimaron en hacernos sentir únicos.
El hotel es de alto target y por eso es un poco costoso pero creo que la atención y sus instalaciones lo valen.
Esperemos volver Dios mediante en Diciembre para pasar navidades o año nuevo allá... YA ES NUESTRO SITIO FAVORITO EN EL CARIBE. UN OASIS.
Gracias a todos nuevamente los que son parte de ESTA JOYA DEL CARIBE!.
Hasta pronto...
Elvis Maggiolo y familia!!

Nos hospedamos en este hotel por una semana en julio y quiero destacar que el servicio es de primera y muy personalizado.
El hotel se encuentra muy bien situado con una vista espectacular hacia el mar. Tiene una estructura minimalista, cada detalle esta cuidado y están realizando mantenimiento en las instalaciones continuamente, nada esta librado al azar. Se respira un ambiente de mucha tranquilidad para poder pasar unas relajantes y hermosas vacaciones. Un lujo total.
La excelente atención merece un punto a destacar. Desde el primer contacto via mail para poder reservar el hotel, Andreina y Eva nos respondieron todas las consultas y sin dudarlo lo elegimos para pasar nuestras vacaciones. Luego la atención de ellas y de todo el personal que forma parte del hotel fue excelente, de mucha calidez. Cuidan permanentemente que no te falte nada y estan en absolutamente todos los detalles.
Nos hospedamos en una habitación muy espaciosa, moderna y con una hermosa ducha al exterior, con una vista a la luna increible.
La estadía incluye el servicio de traslado a la playa con sombrilla, reposeras y cava (si lo deseas, puedes solicitar que te preparen comida para el almuerzo, muy útil porque en las playas no hay muchas opciones). Nos buscaban al horario que les pediamos.
Los desayunos están incluidos, son a la carta y preparados en el momento, al igual que los platos de almuerzo y cena. Una delicia.
Nos aconsejaron alquilar auto y fue genial para poder recorrer la isla, sus playas e ir a visitar otros restaurantes recomendados por el hotel.
Quiero agradecerles por todo lo que nos bridaron en este hermoso hotel boutique, y sin dudas vamos a volver.