LLegamos y tubimos que esperar 1 hora para poder entrar en la habitacion sabiendo la hora que llegariamos y dijeron que no pasaba nada ya que la dueña Chelo, nunca atendio mis llamadas ni Whatsaap, ni sabia donde vivia y luego cuando consegui saber donde vivia, me dijo que era muy temprano para entrar eran pasadas las 11:30 de la mañana, ella no deja entrar antes de las 12:00 ni salir despues de las 11:00, aparte cobra 20 euros por limpirar un studio de 20 metros diarios, al frente de la ventana hay un bar de mala muerte que no deja dormir con la musica y gente, la habitacion esta para remodelar casi no sirve nada, los toma corriente se caen a cachos, falta focos de luz, agua caliente solo tendra 1 litros no dura nada, todo viejo o en mal estado es una ruina.. y la dueña pasa de todo solo quiere la pasta y nada mas. No se lo lo recomiendo ni a mi peor enemigo... Fue fatal esa estadia menos mal que fue corta si no me voy antes como hice...hay que estar loco para volver alli!!!